En el artículo anterior hablamos de los más frecuentes ciberataques; hoy vamos a ver cuáles son las maneras de estar protegidos ante ellos.
Lo más importante es estar informados, conocer de qué manera actúan los ciberdelincuentes para no caer en la trampa.
Desde el momento en que abrimos nuestra cuenta de correo o nuestras redes sociales estamos expuestos a muchos ataques, algunos valiéndose de nuestra inocencia o desconocimiento, y en otras ocasiones por falta de cuidado o negligencia de nuestra parte.
En todos los casos el usuario tiene que mantener el control y el buen uso de sus equipos, esto quiere decir que las claves, el antivirus, el acceso a ciertos sitios, etc, deben ser hechos con responsabilidad y astucia.
Aunque no podemos asegurar que siguiendo estos pasos estarás 100 % seguro, al menos serás menos vulnerable.
Cada usuario debe instalar un antivirus y antimalware que le proteja de los archivos maliciosos, algunos se pueden instalar de manera gratuita aunque, por lo general, la versión pagada tiene mejor funcionalidad. Es responsabilidad de los usuarios hacer un uso correcto de la tecnología.
No se debe utilizar como claves el nombre de nuestros hijos, ni el de nuestra mascota, ni el equipo de fútbol favorito. Por supuesto no poner la misma clave en varias aplicaciones ni en cuentas bancarias. Siempre hay que combinar números, letras mayúsculas, minúsculas y símbolos, de esta forma es más difícil conseguirlas y que no aparezcan en librerías estándar. Muchos de los delitos se cometen por falta de cuidado del usuario.
Es un paso imprescindible realizar transacciones en sitios seguros; cuando accedemos a un sitio bancario o donde se requieran claves, debemos verificar que cuentan con protocolos de seguridad, (https, sftp, etc); que son aplicaciones que encriptan la información para que viajen de una mejor manera.
También al accesar páginas no debemos hacerlo por medio de links que llegan al correo, es mejor digitar la dirección en la barra de búsqueda.
Es muy común sufrir ataques a través de phishing, normalmente a través del email; también las rifas y concursos en las redes sociales son usadas para captar datos, sobre todo por medio de cuentas no oficiales de empresas, con el fin de engañar. Por este motivo es importante que el usuario esté informado de estas formas de estafa y no sea tan inocente o negligente con sus datos personales.
Al configurar la seguridad de tus redes sociales hay una opción para que te llegue una notificación a tu correo o teléfono (autenticación en 2 pasos), con esta opción aunque los ciberdelicuentes tuvieran la contraseña necesitan un código extra para poder entrar a tu cuenta.
En nuestros dispositivos debemos tener un código de desbloqueo, esto es una barrera para que nadie pueda tener acceso a nuestra información del teléfono o computadora mientras no estamos con él.
Recordemos que la privacidad de nuestras redes sociales puede ser configurada según nuestra preferencia, antes de usarlas debemos leer las políticas de cada una de esas redes y hacer uso de esas herramientas.
Debemos acostumbrarnos a respaldar nuestra información. Es algo fundamental pues si sufrimos algún tipo de ataque o tenemos algún problema siempre podremos recuperar la información perdida.
En un primer momento puede que provoque pereza hacerlo, pero a la larga se agradece tener ese respaldo.
Seamos cautelosos y cuidemos nuestra seguridad.