Con la llegada de la internet y las redes sociales a nuestra vida se han dado muchos cambios, algunos han sido para beneficiarnos y otros lastimosamente, han venido a causar problemas. El acoso escolar o bullying, ha sido algo que ha existido siempre, pero ahora con las redes sociales, el acoso se ha extendido más allá del centro educativo. Ya el acoso es algo de 24 horas y trasciende las fronteras, por lo que la angustia y la desesperación que puede sentir una víctima es, sin duda, preocupante. El ciberbullying es un tipo de acoso que se da por medio de Internet, por lo que el alcance y repercusión de una burla se multiplica exponencialmente.
Lo más grave de esto, es que a los jóvenes se les da un teléfono o computadora y no se les explican los riesgos que pueden correr en el mundo virtual, plagado de trampas y de políticas que en muchos casos, ni los adultos entienden. Al utilizar las redes sociales, debemos ser responsables y conocer las consecuencias de nuestras acciones.
En nuestro país contamos con la ley para la prevención y el establecimiento de medidas correctivas y formativas frente al acoso escolar o ‘bullying’ Ley N 9404, que dice:
Acoso escolar o «bullying»: se manifiesta en conductas, activas o pasivas, repetidas y abusivas, con la intención de infligir daño por parte de una o varias personas hacia otra. Es una forma de discriminación en la población estudiantil hacia otro, u otros estudiantes, por sus características o su forma de vida como: orientación sexual, nacionalidad, situación migratoria, etnia, sexo, condición socioeconómica, condición de salud, discapacidad, creencias religiosas, opiniones, prácticas basadas en estigmas sociales y embarazo; la cual puede implicar intimidación, ridiculización, manipulación, el uso de la fuerza, la discriminación, el aislamiento deliberado o cualquier forma de maltrato.
Ciberbullying, ciberacoso o acoso cibernético: es la utilización de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para realizar acoso escolar o «bullying» (Internet, redes sociales virtuales, telefonía móvil, videojuegos «online», «YouTube» o cualquier otro medio virtual que surja en el futuro).
Es importante que nuestros hijos estén preparados para detectar si están siendo víctimas de acoso y darle las herramientas necesarias para que puedan defenderse adecuadamente y no caigan en las provocaciones; muchas veces, ante la desesperación pasan de ser víctimas a victimarios.
Todo centro educativo debe tener un protocolo en el que se establecen las medidas que se tomarán en caso de acoso escolar. Es importante que tanto los alumnos, profesores y padres de familia los conozcan.
La víctima de bullying puede sufrir:
- Depresión
- Trastornos alimenticios
- Bajo desempeño escolar
- Ansiedad
- Problemas de integración social
¿Qué hacer ante casos de acoso?
- Comunicar el acoso a tus padres y directora
- Guardar las pruebas que tengas
- Se realiza las referencias a instituciones públicas y privadas que sea necesario.
- Notificar, ante el Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y la Fiscalía Penal Juvenil, cuando por la naturaleza o la gravedad de los casos de acoso o «bullying» sea necesaria su intervención y amerite atención adicional a la que el centro educativo ofrece.
Esta noticia del mes de mayo, es alarmante; debemos trabajar en este tema. Las charlas a los estudiantes y padres de familia son una buena manera de ir conociendo esta temática y abordándola de una forma abierta, llamando las cosas por su nombre y estableciendo parámetros, antes de que sea tarde.
Juntos podemos cambiar estas estadísticas, trabajemos ya.